Un Viaje a tus raíces

Sanar las heridas del Alma

Este viaje nos es hacia afuera, sino hacia lo más profundo de ti. Es un retorno a tus raíces, a ese origen donde se sembraron las primeras heridas: el abandono, la invisibilidad, la falta de amor, el no sentirte reconocida/o ni aceptada/o, entre muchas más. Son esas heridas silenciosas que se esconden en lo más profundo del Alma y que, aunque no siempre las recordamos, siguen condicionando nuestras decisiones, vínculos y emociones. A través de este recorrido sagrado, te acompaño a mirar con valentía esa parte olvidada de tu historia. No para revivir el dolor, sino para darle luz, comprensión y una nueva narrativa. Sanar tus raíces es liberarte del peso del pasado, romper con patrones ancestrales y comenzar a caminar con dignidad, merecimiento y amor propio.

Este proceso es una salvación para tu Alma. Es un acto de amor profundo contigo misma/o. Porque sólo quien honra sus raíces, puede volver a florecer, puede volver a renacer.

Oración sanadora para Enraizar y Renacer

Amada Fuente de Vida, hoy regreso a mis raíces con humildad, con el Alma dispuesta a recordar quién Soy en realidad y a honrar el camino que me trajo hasta aquí. Anclo mis pies a la tierra sagrada, respiro su fuerza, su verdad, su protección. Desde lo más profundo de mi ser, reconozco mi historia, mis herida, pero también y fortaleza, mi luz, mi capacidad de renacer. Hoy elijo soltar todo lo que me ha desviado de mi esencia. Hoy me reconozco como hija/hijo de la Vida, como semilla Divina que merece florecer. Cimiento mis pasos con amor propio, con respeto hacia mi linaje, y con la certeza de que puedo crear una nueva realidad. Desde este enraizamiento profundo, me permito volver a nacer, construyendo desde el amor, el valor, y la verdad de lo que soy en esencia: Una chispa eterna de luz recorriendo su camino.

Gracias por darme esta oportunidad sagrada de recordar, de sanar y de contraer una vida en armonía, desde la raíz hasta el cielo.

Así es, así será, hecho está.

Gracias, gracias, gracias.

Las máscaras

Recuerda que cada máscara que llevamos puesta, ha servido como defensa y protección ante un dolor que no supimos sostener. Detrás de cada una de ellas se esconde una herida que clama ser vista, sentida y liberada. Solo al desenmascarar la herida oculta podrás reconectar con tu verdad, liberar tu luz y caminar en libertad.

Que esta oración sanadora personal, abra el umbral hacia tu renacimiento.

Oración sanadora: Liberando las Máscaras del Dolor

Hoy me presento ante mi Alma desnuda, sin máscaras, sin armaduras, sin miedo. Reconozco las heridas que he llevado en silencio: la soledad que me aisló, el abandono que quebró mi inocencia, la invisibilidad que apagó mi voz, el no merecimiento que limitó mis sueños, la pérdida de identidad que me desconectó de mi verdad, y el velo que cubrió mi creatividad nacida de la Esencia Divina. Hoy con humildad y amor, elijo mirar estas heridas sin juicio. Las abrazo, las reconozco, las honro y las libero.

Suelto toda máscara que ha no me sirve. Devuelvo el peso que no me pertenece. Reclamo mi voz, mi valor, mi ser auténtico. Permito que la luz de mi creatividad fluya libremente. Y me abro al merecimiento de todo lo bueno, al amor , a la pertenencia, a la verdad de quien SOY.

Hoy rompo los velos del olvido, y renazco en plenitud, en libertad y en amor.

Que así sea, así es, hecho está.

El miedo

Oración sanadora para liberar el Miedo

Hoy reconozco el miedo que habita en mi, sin juicio, sin rechazo, solo con amor. Miedo que me paraliza, que nubla mi visión, que encadena mis pasos h apaga mi voz interior. Hoy desde mi Alma, elijo soltarlo. Rompo los lazos que me atan al temor. Entrego cada miedo a la Luz Divina, permitiendo que sea transformado en fuerza, en confianza, en vida.

Yo soy más grande que mi miedo. Yo soy fe, soy coraje, soy certeza en mi camino. Que todo miedo consciente e inconsciente se disuelva ahora, y que la luz de la confianza guíe cada uno de mis pasos. Me abro al amor, a la protección y a la fe. Camino en libertad, guiada/o por mi sabiduría interior.

Que así sea, así es, hecho está.

La baja autoestima

Oración sanadora para trabajar la autoestima

(para reconectar con tu esencia y recordar tu valor)  

Amada luz que habita en mí, hoy elijo verme con los ojos del amor. Reconozco mi existencia como un acto sagrado, honro mi vida, mis dones y todo lo que soy. Libero de mi mente toda palabra que me disminuyó, todo juicio que me hizo dudar de mi valor. Hoy abrazo mi historia, mis heridas y mis sueños, sabiendo que cada paso me ha forjado en sabiduría. Desde este instante, me comprometo a respetarme, a confiar en mi voz interior y a sostener mi Alma con ternura y coraje. 

Soy digna/o, Soy suficiente, Soy luz en expansión. Y así en amor y gratitud, me reconstruyo, me empodero y florezco de nuevo.

Que así sea, así es, hecho está.